Proceso Sumario de Rendición de Cuentas (Bosch)

El Expediente No. 83573-21 gira en torno al esfuerzo de Lisa, S.A. por exigir una rendición judicial de cuentas a Juan Luis Bosch Gutiérrez por los fondos que él y Villamorey, S.A. han mantenido bajo depósito judicial desde 2008—fondos consistentes en los dividendos no pagados pertenecientes a Lisa derivados de su participación accionaria en Villamorey. El caso se sustenta directamente en hallazgos judiciales de procesos relacionados, incluida la decisión del Primer Tribunal Superior de 2022 que confirmó la legitimación de Lisa para exigir la rendición de cuentas y reafirmó que Bosch actuó como depositario judicial de más de $44.9 millones en dividendos retenidos.

El expediente demuestra que en noviembre de 2008, Bosch—actuando en representación de Villamorey, S.A.—notificó formalmente al Juzgado Undécimo de lo Civil que los dividendos embargados pertenecientes a Lisa estaban “a disposición del Juzgado en cualquier momento”, reconociendo así la custodia judicial y asumiendo todas las obligaciones legales de un depositario. Estos fondos fueron retenidos durante años sin ninguna rendición de cuentas, a pesar de las repetidas solicitudes de Lisa y del claro reconocimiento judicial de la obligación de rendir cuentas por bienes mantenidos en depósito.

En 2021, Lisa inició este Proceso Sumario Especial de Rendición de Cuentas para garantizar transparencia en la gestión de los dividendos retenidos. Aunque el juzgado de primera instancia inicialmente negó la admisión de la demanda, el Primer Tribunal Superior revocó dicha decisión en 2022, ordenó admitir el proceso y enfatizó el derecho de Lisa a obtener una rendición de cuentas completa. Una vez admitido, el proceso avanzó mediante escritos, autos de corrección, intentos de notificación internacional en Guatemala, edictos y, finalmente, el nombramiento de un defensor de ausente cuando Bosch se negó a comparecer.

El litigio posteriormente se vio entrelazado con el tema separado de la cesión de derechos litigiosos de Lisa a BDT Investments Inc. Tras solicitar Lisa y BDT intervenir conjuntamente—Lisa como titular original y BDT como cesionaria—el juzgado negó tanto la legitimación como la intervención. En julio de 2025, el Primer Tribunal Superior confirmó el rechazo, concluyendo que (1) Lisa carecía de legitimación activa debido a la cesión previa, y (2) Bosch carecía de legitimación pasiva porque actuó como representante de Villamorey, S.A. y no a título personal. No obstante, el Tribunal eliminó la sanción de costas de $40,000 impuesta por el juzgado a Lisa, al reconocer que Lisa actuó de buena fe para hacer valer sus derechos.

Desde entonces, Lisa ha presentado un recurso de casación ante la Corte Suprema de Justicia, alegando que el fallo de alzada contiene errores de derecho, valoró incorrectamente la prueba y omitió pronunciarse sobre la solicitud de intervención de BDT conforme exigen los artículos 612 y 835 del Código Judicial. Ese recurso permanece pendiente.

El hecho subyacente permanece inalterado: Villamorey y Bosch han mantenido los dividendos de Lisa bajo depósito judicial desde 2008 y nunca han rendido la rendición de cuentas exigida, pese a haber reconocido el depósito y pese a reiteradas órdenes judiciales que afirman la obligación de rendir cuentas. La cuestión jurídica ahora ante la Corte Suprema es si debe continuar el Proceso Sumario Especial de Rendición de Cuentas, y si Lisa y/o BDT deben ser reconocidas como la parte legitimada para exigir dicha rendición.

Por lo tanto, las actuaciones judiciales del Expediente No. 83573-21 siguen activas. El problema central aún no resuelto es la ausencia total de una rendición de cuentas por parte de Bosch respecto de los fondos mantenidos bajo autoridad judicial por más de dieciséis años, pese al reconocimiento formal del depósito y a los reiterados intentos de Lisa y BDT por obtener supervisión judicial y restitución.